PARADISE, NOW! Celda 44.



Tanto el título como la obra misma hacen alusión a la mítica obra de teatro “Paradise, Now!” del Living Theater fundado por Judith Malina y Julian Beck en Nueva York y que desarrolló su actividad desde 1947 hasta 1980. Este grupo de teatro rompió la barrera Arte-Vida. Eliminaron la ficción en el comportamiento del actor, lo cual constituyó para ellos una actitud estética y política.
En este espectáculo, el Living desnudó a todos sus actores, quienes invitaron a los espectadores a hacer el sexo en la calle, armando una orgía colectiva en plena vía.

Nuestra particular propuesta surge a partir de una carta que encontramos arrugada en un rincón del armario de la celda 44. Esta carta se encuentra en lamentable estado de conservación, pero todavía podemos leer las líneas en las que nos inspiramos para realizar la intervención. Al leerla atentamente, nos dimos cuenta que la carta, jamás enviada, perteneció a un joven seminarista norteamericano llamado Franky e integrante del grupo de teatro ya mencionado. La carta se encuentra a disposición de los espectadores en el mismo lugar donde fue hallada y nos habla de su vida pasada y de los sentimientos melancólicos que invadían su estancia en el seminario de Huesca.

Paradise Now es una propuesta poético-artística que se desarrolla en el interior de la celda 44. Esta celda tienen un espacio de alrededor de cuatro metros cuadrados, una amplia ventana y el armario. Tiene la característica de que su ventana es el marco a través del cual vemos la palmera que Franky tanto menciona en su carta. El aspecto de esta palmera es parecido al estado de conservación del edificio y de la carta.

Mediante la propuesta de artística, el interior y el exterior adquieren una relación más íntima. La pintura blanca se transforma en un degradado multicolor que pertenece a otra época y a otro lugar, y sobre éste se repiten sin cesar motivos vegetales de palmeras.
Las paredes blancas originales dejan (por unos momentos) de ser un testimonio de la ascética vida para la que sirvieron y gracias a su nueva configuración surgen algunas preguntas que nos invaden cuando entramos en el espacio.


In Memoriam.